Sobre La Hora Libre

Cuando conocí La Hora Libre yo era una persona muy cerrada, sin ganas, sin ilusión de nada, ni de seguir viviendo. Era triste y sin personalidad. Sin humor. Y en mí lo único que conocía era la soledad, porque siempre estaba a mi lado y me encantaba estar con ella porque nunca me pedia nada por su compañía. Pero cuando llegaron esta gente tan maravillosa que venía a este lugar a traer lo mejor para lograr hacer un taller de chamuyo, le quedó La Hora Libre…..

Comentarios