Luego de unos encuentros introductorios para la conformación del grupo, comenzó el primer módulo de talleres del espacio de promoción de instancias de comunicación y creatividad, que desde 2006 se denomina “La hora libre” y que está a cargo del Proyecto “Miradas y mundos posibles: comunicación comunitaria en la cárcel” del Área de Comunicación Comunitaria.
Con un grupo de alrededor de 20 jóvenes que se encuentran privados de su libertad en la Unidad Penal N°1 de Paraná, el actor, director y escritor Santiago Marcos -junto al equipo extensionista- dinamiza los encuentros semanales a través de los que se busca realizar producciones individuales y colectivas a través de las potencialidades del teatro, como medio expresivo.
El módulo de Comunicación y teatro tendrá un total de ocho encuentros que se proponen promover la experiencia como actores y a través del cuerpo y la voz, inventar y contar historias.
Los próximos módulos para la versión 2015 de La hora libre en el marco del proyecto de extensión serán: Comunicación y arte, Comunicación y literatura y Comunicación y radio. Para estas próximas instancias también se contará con especialistas y docentes invitados. Desde el equipo se advierte que la construcción de narrativas y representaciones propiciará la visibilidad de las prácticas que los y las detenido/as tienen para mostrar al resto de la sociedad, poniendo en debate la construcción de sentido que estigmatiza a las personas en situación de cárcel.
“Miradas y mundos posibles” es un proyecto de extensión que propone diversas instancias de comunicación y creatividad protagonizadas por sujetos que se encuentran privados de su libertad en las unidades penales (de varones y mujeres) de la ciudad de Paraná, desde la perspectiva de la comunicación comunitaria y la educación popular. El equipo que dirige la Lic. Lucrecia Pérez Campos, está integrado por docentes y estudiantes de las carreras de Comunicación Social, Ciencias de la Educación y Trabajo Social. Además de La hora libre, se está desarrollando un ciclo de cine latinoamericano en el penal de mujeres, los sábados cada quince días.
Esta propuesta se enmarca en la vinculación que la Universidad Nacional de Entre Ríos viene sosteniendo con las instituciones penales, garantizando el derecho a la educación y el acceso a la cultura de todo/as los ciudadanos.
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